viernes, noviembre 11, 2011



There must be lights burning brighter somewhere
Got to be birds flying higher in a sky more blue
If I can dream of a better land
Where all my brothers walk hand in hand
Tell me why, oh why, oh why can’t my dream come true

There must be peace and understanding sometime
Strong winds of promise that will blow away
All the doubt and fear
If I can dream of a warmer sun
Where hope keeps shining on everyone
Tell me why, oh why, oh why won’t that sun appear

We’re lost in a cloud
With too much rain
We’re trapped in a world
That’s troubled with pain
But as long as a man
Has the strength to dream
He can redeem his soul and fly

Deep in my heart theres a trembling question
Still I am sure that the answer gonna come somehow
Out there in the dark, theres a beckoning candle
And while I can think, while I can talk
While I can stand, while I can walk
While I can dream, please let my dream
Come true, right now
Let it come true right now
Oh yeah

martes, octubre 25, 2011

Versión cinematográfica bastante verosímil sobre cómo pudieron ser los últimos compases en la vida de León Tolstói. Entrañable el personaje de Lev. Se aprende austeridad y sensatez de él. Para resaltarlas es necesario el contraste con su mujer, la terrible Condesa Sofía. Son don Quijote y Sancho, idealismo y materialismo.

Por otro lado están los prosélitos que quieren hacér política y religión de lo que solo es filosofía y amor. Vale la alegría verla.
Urga es el aparejo con el que los pastores mongoles cuidan y controlan a sus rebaños. Esta película es un precioso homenaje a la vida de estas gentes que en un momento dado entran en contacto con un camionero ruso, lo cual da situación a pasajes divertidos y muy curiosos. Merece la pena verla para descubrir una manera de contar, la de Mikhalkov, absolutamente propia, personal y muy original. En el aspecto musical destaca el maravilloso tema ‘Las colinas de Manchuria’, que canta el ruso, un ex-soldado, en un bar, muy sentidamente pese a su borrachera.

miércoles, octubre 19, 2011



Quise saber algo sobre Publio Cornelio Escipión y me fui a las primeras páginas de este libro que me regalé el año pasado cuando menos tiempo tenía para leer. Acudí a él como a una enciclopedia, solo por consultar y por obtener una referencia del personaje. Entonces me animé y seguí todo el capítulo de la Hispania romana. Luego me animé mucho más y no pude dejar de leer sus 1077 páginas. En ese espacio está condensada una historia de España desde la llegada de los romanos hasta la última guerra civil, la del 36.

Pensé dejarlo en plena Edad Media (soy de esos a los que no les importa conculcar esa ley no escrita del mal lector por la cual no se puede abandonar un libro una vez comenzado) pero la decadencia de Al-Ándalus me conmovíó ¿cómo un pueblo bárbaro, atrasado como el de los reinos cristianos del norte pudo, de norte a sur, acabar con un mundo tan rico y avanzado (no solo comercial y económicamente sino culturalmente) como el de Al-Ándalus?

De la Edad Moderna española (austrias y primeros borbones) se aprende cómo un país lo puede tener todo y no saber progresar adecuadamente; de la Edad Contemporánea (desde la Guerra de la Independencia hasta ahora)que escribir en España es llorar y de todas las edades y épocas se puede concluir que hemos sido un país contradictorio y cainita en el que vivir nunca fue fácil.

jueves, septiembre 22, 2011

Voy a las estanterías, me faltan varios libros por clasificar esta tarde. Veo este que se subtitula "22 episodios nefastos de la historia de España". Me parece interesante, me va a entretener al menos. Lo manipulo, su encuadernación es buena. Tengo que clasificarlo y para ello lo primero es consultar el índice a ver qué episodios nefastos me depara:
Abarca muchos siglos de nuestra historia, todos los siglos caben en 250 páginas.
Me voy al siglo XX y leo esto:

1906 La masonería defiende el terrorismo
1910 Pablo Iglesias anuncia su política en las Cortes
1930 Golpe Republicano que fracasó
1931 Alfonso XIII abandona a los españoles
1934 Largo caballero y Companys se alzan en armas contra la República
1937 El PNV traiciona al Frente Popular
1938 Negrín pacta con Stalin
1944 El PCE invade el Valle de Arán


No debo guiarme por los títulos a la hora de clasificar (la clasificación tituliana es muy arriesgada), tampoco debo tenerlos en cuenta a la hora de valorarlo como obra de historia aunque salte a la vista el sesgo hacia la diestra. Huele mal de primeras que obvie el año 1936 ¿no sucedió ningún episodio nefasto ese año? ¿menciona el golpe republicano en 1930 y no la Sanjurjada de 1932?...muchas preguntas de estas me asaltan y mis cejas se perfilan y ascienden incrédulas hasta donde la alopecia quiere que llegue mi frente.
Le doy una oportunidad no sea más que por afinar un poco en el índice de materia que debo asignarle. Comienzo a leer un capítulo, otro, otro.. al-Andalus, R.R.C.C., FelipeII y... no sigo, no puedo seguir y además me declaro inapetente. Es imposible ser más sectario y caradura. Me percato de que el sesgo ni siquiera es hacia la derecha o la izquierda sino hacia el cinismo, la falta de rigor y ecuanimidad. Libros así escritos son una falta de respeto hacia la ciencia de la historia, vale decir, hacia el pasado que describe y hacia el futuro que apunta; hacia las personas que vivieron esa historia y hacia las que hoy quieren conocer su pasado.

Señor Vidal, o quien quiera que le escriba estas cosas, deje de escribir tan desaliñadamente y medite. Ya sé que para sacar al mercado una docena de libros anuales eso de meditar no, no se puede, pero es que no queremos leer nuestra historia así.

martes, septiembre 20, 2011

lunes, septiembre 19, 2011

LA NOBLEZA DE LA CONDICIÓN

Todos -casi todos- esconden un puñal.
Solo esperan el momento mejor para clavarlo.
En tanto, sonríen, saludan, ponen buena cara,
pues algún gesto o cara hay que poner...

Los perros de la envidia, los osos arrogantes,
el orgullo como gigantes hormigas,
la altivez espantosa, la ingente vanidad
egomaníaca y en tiña como un pez enfermo,

llenan ese cóctel que en apariencia es
solo batintín de palabras cordiales pero huecas.
El puñal y la horda aguardan su momento.

Cuando llegue, todo será carnicería y fango.
Aplastados, heridos, humillados o rotos entre sí
los altaneros hombres celebran su destino.

martes, agosto 23, 2011

Si cambiamos una letra de lugar en el apellido de este escritor tenemos el nombre del protagonista de El amante bilingüe. Juan Marés se ha convertido en un mendigo de oficio. Toca el acordeón en las Ramblas de Barcelona desde que Norma, su mujer, una burguesita que trabaja como funcionaria en la Generalitat, lo engañó y abandonó. Desde entonces no levanta cabeza, se conduce por la vida como un alma en pena, no cura las heridas y sigue perdidamente enamorado de ella. El pobre no tiene cara ni casa; no es nadie ni espera nada. Juan Faneca (el otro gran personaje de la novela), en cambio, es un charnego estirado, elegante, gracioso, atrevido. Se toma la vida de otra manera y triunfa en las empresas en las que Marés fracasa. Son amigos íntimos pero se detestan mutuamente. ¡Ah! se me olvida decir que ambos, Marés y Faneca, son una y la misma persona. Marés se disfraza de Faneca (peluca, lentilla, patillas, pestañas) para reconquistar a Norma.

A través de estos dos personajes el autor estudia el muy sugerente tópico de la alteridad, del otro, de las diversas identidades que pueden converger en una misma persona. Muchos y muy grandes escritores han abordado este tema. Se me vienen a la cabeza Stevenson, Pessoa, J.R.J., Borges. Marsé lo lleva al extremo haciendo que uno le envíe misivas al otro o haciendo que el otro sienta remordimientos por ponerle los cuernos al uno y así el desdoblamiento, la escisión de la personalidad llega a ser casi ridícula.

Además de ésta, otras dualidades pueden encontrarse: lenga catalana/lengua española; catalán/charnego; alta burguesía/populacho.

Quizás sea el conocimiento profundo de las clases sociales lo que más me gusta del autor, cómo las describe, cómo sabe de sus maneras, su pensamiento, su lenguaje, sus deseos y sus frustaciones.

Me han entrado ganas de ir a Barcelona.

miércoles, agosto 17, 2011

Arthur Pepper (1925-1982), fue un magnífico músico de la costa oeste de los Estados Unidos. Dotado de una talento natural para el jazz (también destacó como baladista y como músico de orquesta) no quiso o no supo encenderle un solo cirio a la santa gloria del éxito. Se diría una de esas personas a las que el triunfo incomoda y solo es moderadamente feliz en la búsqueda de lo auténtico.

Su obra fue reflejo de su vida, pero un reflejo convexo: parece mentira que alguien cuya vida se parezca a lo narrado en este libro pueda crear una música tan bella y emocionante. En su vida y/o en su obra hallamos riesgo, improvisación, vicio, sordidez, lirismo, derrota, resistencia, sensibilidad, soberbia, egocentrismo. Sinceridad temeraria, culto a la verdad, identificación de esta con la belleza, obsesión con el sexo, con el saxo, las mujeres, la heroína, la cocaína, el ácido y el alcohol, cirrosis hepática, cárcel, infancia enfermiza, carencias afectivas, introversión, odio inquebrantable a la delación, a la falsedad, San Quintín, tatuajes, racismo, música, más heroína y robo, reformatorio, jam sessions. Saxo alto, tenor y clarinete.

Una vida ejemplar es un relato sobrecogedor.

sábado, julio 23, 2011

Esta novelita narra la historia de una joven estudiante norteamericana, Nancy, afincada en Alcalá de Guadaira con el propósito de tomar notas para una tésis sobre literatura y antropología española. A través de las cartas que ésta envía a su prima Betsy sabemos de sus amores y peripecias en tierras andaluzas. Podemos, por tanto, encajar esta novela dentro del género epistolar. Género que da mucho pábulo a una literatura intimista (pienso en Pepita Jiménez de Juan Valera o en El Abrecartas de Vicente Molina Foix) y que resulta muy eficaz para obras en clave humorística como ésta o Pantaleón y las visitadoras de Mario Vargas LLosa.

Sin embargo, me ha decepcionado un poco. Se exagera demasiado el folclore andaluz para que haga contraste con la cultura yanqui de la protagonista. Ésta, por otro lado, resulta inverosímilmente ingenua, desagradablemente gilipollas. Quien haya vivido con una estadounidense sabe que no son tan cretinas, sino al contrario.

El humor casi siempre se basa en la distinta percepción que de las situaciones tienen los personajes debido al cruce de culturas, en interpretaciones literales de lo que es simbólico y viceversa, en las perplejidades de Nancy ante lo extravagante andaluz y gitano, en sus errores de comprensión, en juegos de palabras, homonimias, paranomasias, metátesis... el autor usa y abusa de todo esto de tal forma que a la quinta carta ya cansa y son diez.

En la p.128
- ".. y tú ¿no nadas nada?-no traje traje"

Ésta ya me sonaba. Igual que la frase en la p. 83
"¿Cuándo se ha visto un torero con bigote?"
Lo que son las cosas.

En la p. 195 hay una incongruencia: si el duque habla a Nancy en perfecto inglés ¿cómo se explica ahí la palabra "garete" y el consiguiente chiste?
En fin, creo que es una obra sobrevalorada en la literatura española.

Ramón J. Sender, lo siento pisha, pero no sé si es que tú la escribiste a la ligera o que yo la he leído muy superficialmente.

miércoles, julio 20, 2011

"La resaca puede y debe entenderse como un defecto de nuestro organismo para sobrellevar las alegrías de origen artificial"- esto lo dice Felipe B. Reyes en la penúltima entrada de su blog, la titulada La Resaca. Jajajajajajajajaja la culpa a nuestro cuerpo que no sabe asimilar la alegría de beberse, pongamos por caso, 15 cervezas, 2 cubatas y un chupito asesino jajajaja es una idea de lo más hilarante (al hilo de todo lo que escribe este hombre en prosa). Procuraré interiorizarlo antes de irme de vacaciones.




sábado, julio 16, 2011



Alguien, no sé quién, no lo recuerdo, no importa, definió la poesía como una "introspección lírica": un estudio íntimo de uno mismo expresado de manera más o menos estética. La poesía de Carlos Marzal es así, o es eso. Tal vez toda buena poesía lo sea y la de este poeta de una manera más que evidente. Nota uno al "yo poético" siempre pesquisando, preguntándose, investigándose a ver qué, cual y cómo es su interacción con el mundo físico y metafísico. Los poemas de este libro son respuestas a las perplejidades de un alma con una capacidad de asombro superlativa y una pulsión vital asombrosa.

Rezuma el optimismo de alguien atraído por la luz, no de alguien que huya de la sombra.

"En la acción reside la felicidad" dijo Aristóteles no sé si con estas mismas palabras. Seguramente así lo debe creer Marzal porque sus versos son como la consumación de actos, actos que parecen ocurrir en el mismo momento que él los escribe.

De ejemplos de todo esto que digo está "Ánima mía" lleno. Explicar poesía como esta no es justo y además no se intenta, pero sí es conveniente que el lector se la explique a sí mismo para que la transfigure y se transfigure en ella.


Cierro la apuntación con el poema que cierra el libro


A PÁJAROS

Vamos a volar pájaros,
salgamos de una vez.
Hay demasiado adentro en este día,
y adentro es fealdad,
adentro es húmedo.
Vayámonos a azules, a intemperies,
cúmulos de algodón,
las musarañas
de estarnos en las nubes,
por sus cerros.
Doctoremos la vista en lo que corre.
Marchémonos a nidos,
nos espera
nuestra felicidad, arborescente.
Basta con arrullarla entre las manos,
y sentirla latir
-es una alondra-,
para que exulte, viva,
y que exultemos.
Vayámonos a piedras,
a ese lago que aguarda pensativo,
y quebremos sin más
sus turbias aguas lúgubres.
Delincamos,
contra toda esa luz que nos delata,
ahora que nos queremos sigilosos.
Descamisemos
a nuestro más vestido;
descorbatémoslo de tanto nudo
como lo tiene ahogado, con el aire
que todo lo enrarece, en la garganta.
Que aprenda a respirar en lo que fluye.
Cierra ese libro abstracto,
y sal a comprender lo que has leído.
Pongámonos a carne pasajera,
vámonos a mirones.
¿Quién sabe qué sentido es el del verde
con que nos quiere verdes el deseo?
A ver qué levantamos,
con un poco de suerte, hasta la boca,
con un poco de arrojo, hasta la muerte.
¿Estamos a gozar,
o estamos secos
de toda sequedad, sin una gota?
¿Estamos a vivir
o es que no estamos?

sábado, julio 09, 2011

A mí me parece que Javier Marías posee en grado nada común las virtudes de algunos de mis más admirados novelistas: la capacidad reflexiva de José Saramago, el ingenio de Benjamín Prado, la cultura borgiana, la sensibilidad de L.A. de Villena, la imaginación de García Márquez y de Cervantes y la elegancia de Vargas LLosa.

Javier Marías es un escritor pulido pero no solemne, en su escritura no hay frases cursis o altisonantes; inteligente pero no de esos escritores que abusan de su ingenio usándolo de manera torrencial e invasiva.

Hay una característica en las dos novelas suyas que he leido (esta y Los enamoramientos) que me seducen como lector: aptitud para analizar y desentrañar el lado oculto de las personas y las cosas. El que lo lea sabrá a lo que me refiero.

viernes, julio 01, 2011

jueves, junio 23, 2011



Más allá del tema, interesante en estos tiempos de despidos, paro e inestabilidad laboral (por decirlo de un modo eufemístico) lo que más llama la atención de esta peli es el cambio de roles: ni él es el típico cuarentón padre de familia con la vida programada y resuelta ni ella la típica mujercita fiel, políticamente correcta. Muy bien Clooney

jueves, junio 16, 2011


Pero ¿no basta con que seas la apariencia
para encender un alma que evita la verdad?
¿Qué me importan tus risas y qué tu indiferencia?
¡Salud, mujer o máscara! Yo adoro tu beldad.


Charles Baudelaire


Baudelaire fue simbolista, sí; pero antes y sobre todo romántico. Esta última estrofa del poema "El amor de la mentira" sintetiza el ideal del romanticismo: exaltación del sentimiento, libertad y subjetivismo. Al poeta no le interesa si ella es aparente o real, él la transfigurará poéticamente; da igual cómo se muestra o es, él la verá a través de su sentimiento.

domingo, junio 12, 2011


Léanla, es una obra maestra.

jueves, junio 02, 2011




Grandioso. Analgésico. Tienes alguna preocupación, algún dolor, te tumbas diez minutos en la cama escuchando este adagio en el mp3, cierras los ojos y... todo aquello que acuciantemente te hostigaba se torna minúsculo, insignificante, poca cosa, nada.

jueves, mayo 26, 2011


Ésta no es lo que suele decirse una novela de entretenimiento. Quiero decir, que además de entretener denuncia y nos hace reflexionar sobre unos hechos históricos concretos. Por un lado la Transición ("Transacción" la llama por lo que en ella ve de trato, de pacto de renuncias...) y por otro la Ley de Memoria Histórica.
La Transición la aborda desde un punto de vista crítico, nos la muestra a través de una fotografía en blanco y negro haciendo resaltar el efecto claroscuro. Hay una frase clave en la novela que resume esto muy bien: "La Transición fue una victoria de todos que también tuvo sus perdedores".

El autor ahonda deliberadamente en el más triste y turbio episodio de la Transición: los asesinatos de los abogados laboralistas de la calle Atocha a manos de un comando ultraderechista español "Fuerza Nueva" y al parecer con la participación de un pistolero de la Red Gladio: organización paramilitar clandestina anticomunista pagada por, ATENCIÓN, la CIA. Hasta aquí los hechos históricos, increibles pero contrastados. Sad but true.

¿Cómo logra urdir los hilos de esta mezcolanza de temas y además que queden tejidos como una trama de espias a la que además se le hilvana un pequeño tratado filosófico de la relaciones de pareja y un minúsculo manual crítico sobre el abuso de poder por parte de los jueces? Eso solo Benjamín y Dios lo saben. Y Dios solo a veces.

A uno, como seguidor suyo en todas sus facetas: poeta, novelista, articulista, ensayista, tertuliano y rockero, solo se le ocurre pensar que probablemente no sea difícil encontrar mejores obras al respecto; o sea, estudios sobre estos temas más profundos y rigurosos. Pienso que sí, pero también creo que perderse a Benjamín, sus originales metáforas, sus ingeniosas comparaciones, sus juegos de palabras, sus aforismos, en fin, perderse su contagioso buen humor y su estupenda mala leche, eso, eso no sería sensato.

miércoles, mayo 25, 2011


How many roads must a man walk down
Before you call him a man?
Yes, 'n' how many seas must a white dove sail
Before she sleeps in the sand?
Yes, 'n' how many times must the cannon balls fly
Before they're forever banned?
The answer, my friend, is blowin' in the wind,
The answer is blowin' in the wind.

How many times must a man look up
Before he can see the sky?
Yes, 'n' how many ears must one man have
Before he can hear people cry?
Yes, 'n' how many deaths will it take till he knows
That too many people have died?
The answer, my friend, is blowin' in the wind,
The answer is blowin' in the wind.

How many years can a mountain exist
Before it's washed to the sea?
Yes, 'n' how many years can some people exist
Before they're allowed to be free?
Yes, 'n' how many times can a man turn his head,
Pretending he just doesn't see?
The answer, my friend, is blowin' in the wind,
The answer is blowin' in the wind.

jueves, mayo 05, 2011

Dice Séneca en sus máximas morales: "Saldré de la vida protestando que amé la buena conciencia y las buenas ocupaciones, y que no disminuí la libertad de nadie y ninguno disminuyó la mía."
Acaso sea esta la más alta moral que deban seguir los hombres: no disminuir la libertad de los demás.

viernes, abril 15, 2011


De no ser porque de alguna forma ya pensaba así este libro me hubiera cambiado la vida. Lo que ignoraba es que esto se hubiera llevado a la práctica alguna vez. Cataluña, desde julio 1936 hasta lo sucesos de mayo de 1937. "...la gente se mantenía contenta y esperanzada. No había desocupación y el costo de la vida seguía siendo extremadamente bajo; casi no se veían personas manifiestamente pobres y ningún mendigo. Por encima de todo, existía fe en la revolución y en el futuro, un sentimiento de haber entrado de pronto en una era de igualdad y libertad. Los seres humanos trataban de comportarse como seres humanos y no como engranajes de la máquina capitalista. En las barberías había letreros anarquistas explicando enfáticamente que los barberos habían dejado de ser esclavos. En las calles había carteles de colores exhortando a las prostitutas a dejar su oficio. para alguien que procediese de la burlona y endurecida civilización inglesa, había algo casi patético en la literalidad con la que aquellos españoles idealistas interpretaban los gastados lemas de la revolución [...] En toda tienda y en todo café se veían letreros que proclamaban su nueva condición de servicios socializados; hasta los limpiabotas habían sido colectivizados y sus cajas estaban pintadas de rojo y negro. Camareros y dependientes miraban al cliente cara a cara y lo trataban como a un igual. Las formas serviles e incluso ceremoniosas del lenguaje habían desaparecido. Nadie decía señor, o don y tampoco usted; todos se trataban de «camarada» y «tú», y decían ¡salud! en lugar de buenos días."
"Yo estaba integrando, más o menos por azar, la única comunidad de Europa occidental donde la conciencia revolucionaria y el rechazo del capitalismo eran más normales que su contrario. En Aragón se estaba entre decenas de miles de personas de origen proletario en su mayoría, todas ellas vivían y se trataban en términos de igualdad. En teoría, era una igualdad perfecta, y en la práctica no estaba muy lejos de serlo.[...] muchas de las motivaciones corrientes en la vida civilizada —ostentación, afán de lucro, temor a los patrones, etcétera— simplemente habían dejado de existir. La división de clases desapareció hasta un punto que resulta casi inconcebible en la atmósfera mercantil de Inglaterra; allí sólo estábamos los campesinos y nosotros, y nadie era amo de nadie[...]duró lo bastante como para influir en todo aquel que lo experimentara."


"Orwell me enseñó que una literatura desprovista de moral es inhumana." ha dicho Vargas LLosa en su discurso ante la Academia Sueca. Es exacto. Orwell es exactamente eso, una moral.

martes, abril 12, 2011



Una canción puede pulsar el resorte de un sentimiento que creíamos olvidado. Son las canciones que avivan ese sentimiento dormido en sótanos profundos, en íntimas galerías donde acumulan polvo las vivencias caducas que no desechamos del todo. Son canciones raras, vibrantes, vagamente tristes como la ventana desde donde miramos los días de lluvia. Canciones que situan el dolor tan cerca del gozo que al escucharlas por un momento creemos que moriremos en esa espada y después nos inflama el alma de dulzura.
A veces una de estas canciones modifica nuestro pasado y nos lo devuelve deformado en una nostalgia de nosotros mismos que sería mejor definir con la palabra melancolía. Estas canciones son idénticas a naranjas o a poemas: redondas y todo jugo; describen el mundo y penetran la verdad hasta incendiarla.
Esta es una de esas canciones

miércoles, marzo 30, 2011


Recoge su obra poética escrita entre 2006 y 2009. Heterogéneo: seguidillas, haikus, sonetos, verso libre. Lees a este poeta con curiosidad y pendiente siempre a la sorpresa. Su estilo claro, breve e ingenioso, despojado de solemnidad pero salpicado de tradición, es una fiesta a la inteligencia.
Las referencias sobre él me llegaron no como escritor sino como director de la Biblioteca Nacional durante el Aznarato. Tuve ocasión de conocerlo, hablar un poco con él en la feria del libro de 2008. Me firmó su antología corregida y ampliada "Su nombre era el de todas las mujeres" que leí con verdadera devoción.
Este "Reino blanco" tal vez sea un poco más nostálgico. La sección "Hojas de otoño" está cicatrizada de melancolía y esto es algo que no percibí en el anterior poemario. En todo caso persiste su marchamo amable, moderno, cuya profundidad no resta ocasiones para que el lector se emocione y sonría.

viernes, marzo 18, 2011


Este es uno de esos libros a los que conduce "Las armas y las letras". Acabo de acabarlo y estoy encantadoramente encantado.
Es una novela-ensayo (literatura e historia abrazadas y confundidas) dividida en tres capítulos, tres partes, tres historias que giran en torno a un solo acontecimiento: el fusilamiento fallido en enero de 1939 del escritor y político falangista Rafael Sánchez Mazas. Se cuenta también su posterior vivencia como forajido y refugiado en masías y pajares hasta la entrada de los nacionales en Gerona. No quiero contar más. El libro está lleno de emoción, de humanidad. Siendo su planteamiento muy literario, la historia narrada es muy real, por lo que divierte e instruye al mismo tiempo. Un libro magnífico.

lunes, marzo 14, 2011


No voy a entrar en valoraciones. No puedo aseverar que sea buena o mala, sensibloide o kitsch; si se parece a Verano Azul ni es mi culpa ni me importa. Solo puedo decir que en arte se agradece mucho la sinceridad y que viéndola he disfrutado, he sufrido y he llorado intensamente.

sábado, marzo 05, 2011


Absorbente ensayo sobre el papel de los escritores durante el periodo de la Guerra Civil Española, sobre sus afinidades o militancias políticas, sobre la evolucion del pensamiento de cada uno de ellos y la de sus obras al influjo de la contienda.

Edición cuidadísima en todos los sentidos: ilustraciones, índices de materias y onomástico, anexos biográficos y biobibliográfico y cuadro cronológico histórico y literario. 3ª ed. actualizada en 2010. De verdad, es una edición preciosa. El contenido no se queda atrás. Aquellos a quienes interese la Guerra Civil y los escritores de fin de siglo XIX y primer tercio del siglo XX hallarán una lectura hipnótica, impostergable una vez iniciada.

Se le ha reprochado afán de equidistancia, o sea, estar tan cerca de republicanos (rojos, leales, comunistas) como de Nacionales (azules, rebeldes, fascistas). El autor se defiende de esto en el prólogo creo que sin demasiada eficacia. Pienso que eso más que un error es un acierto ya que haberse referido a unos y otros en términos maníqueos de buenos y malos hubiera sido aburrido. Es cierto que toma distancia, incluso recurre al humor (por ejemplo cuando habla de la afición gastronómica de Max Aub), también es cierto que intenta ser objetivo, pero todos sabemos que eso es imposible. Enseguida aparecen juicios personales. De inmediato el lector advierte notas de indisimuladas simpatías o de manifiestas ojerizas y comprueba que se han seleccionado opiniones, capítulos concretos que avalan una opinión y no otros que podrían justificar la contraria. Parecen antipatías personales más que políticas. Pondré un ejemplo para que mi observación no quede sin asidero: sobre Neruda ofrece la visión egoísta, cobarde y oportunista que de él tienen Juan Larrea, Juan Ramón Jiménez y su paisano Morla Lynch, pero no se contempla la de Alberti, Aleixandre o M. Hernandez. Para hablar de Alberti, Bergamín, Neruda utiliza un tono y para hacerlo de Unamuno, Juan Ramon Jiménez, Machado, Morla otro. Con hispanistas como Ian Gibson está claro que no comulga. Llega al sarcasmo siempre que habla de los Alberti; también cuando dice que Cernuda no asiste en Valencia a las sesiones del Congreso Internacional de Escritores por encontrarse "ocupado en sus baños de mar".

En el momento que hay narrador hay un punto de vista, interpretación y selección determinada de datos. Por ello estos detalles de la obra son excusables, además sin estos carecería de interés. La grandeza de la obra me parece que es precisamente esa valentía de vencer el obstáculo de la imposible imparcialidad. Es de elogiar la gran riqueza de datos, personas, publicaciones, anécdotas que abundan el texto. Pienso que lo divertido e interesante y al cabo lo que de lo sucedido de la historia queda es lo que en esta hay de literatura.

Por último, este libro posee esa otra cualidad que desde mi punto de vista debe poseer todo buen libro y que faltándole otras (que no es el caso) bastaría para salvarlo: ser un puente hacia otras lecturas.

jueves, enero 27, 2011



Te la recomendé porque quería saber tu opinión sobre lo que en ella se trata.

Es una novela sobre el amor (pero para nada romántica). Interesante esto.
A mí me parece que el autor satiriza un poco a los que idealizan demasiado el amor, ese amor primero, inocente, pretendidamente puro... intenta desmitificarlo ¿cómo lo hace? a través de la ironía, a través de varios pasajes fastidiosos en que describe el amor edulcorado entre una hermosa burguesita aria y un judío bien posicionado.

Es normal que te esté costando. Si te digo la verdad a mi también me resultaron pesados esos pasajes a propósito sensibleros en que Ariane reflexiona sobre mil pormenores, sobre sus vestidos, la decoracion de su casa...idealizando en exceso sus sentimientos. También los capítulos iniciales son excesivos queriendo remachar el carácter hipócrita y snob de la familia de Adrien Deume.

Sin embargo creo que es una gran novela. Exige paciencia y la participación activa del lector, hay que pensar un poquito. Dependiendo de si lo que pretende es analizar el calado psicológico de los personajes o de si, por otro lado, también que conozcamos a fondo sus actos, el autor recurre a una escritura automática al más puro estilo Kerouac o se refocila en los detalles más nimios al más puro estilo Proust. Mezcla de estilos.

Encuentras páginas interesantes que tardas muchísimo en leer porque contiene frases, ideas, giros... que te hacen levantar la cabeza y perder la vista en un punto y ahí te quedas pensando, retrotrayéndote a muchísimas cosas que has vivido o has soñado. Pero sí, hay ratos en que cansa.

Un beso

martes, enero 18, 2011



Es el estilo personificado. Concesiones al mercado solo dentro de los límites que exige la subsistencia. Ductilidad para adaptarse a todos los estilos. Música como preocupación intelectual, como oficio y como placer, eso es lo que parece querer expresar este artista.


Los raros de Rubén Darío, publicado en 1896, recopila una serie de semblanzas de autores admirados por el poeta nicaragüense.

En la primera edición del libro, aparecida en octubre de 1896 en la Tipografía La Vasconia de Buenos Aires, aparecían las semblanzas de diecinueve autores: Leconte de Lisle, Paul Verlaine, Villiers de l'Isle Adam, Léon Bloy, Jean Richepin, Jean Moréas, Rachilde, Teodoro Hannon, Lautréamont, Max Nordau, George d'Esparbés, Augusto de Armas, Laurent Tailhade, Fra Domenico Cavalca, Eduardo Dubus, Edgar Allan Poe, Ibsen, José Martí y Eugénio de Castro. En la segunda edición, impresa en Barcelona en 1905, se añadieron las semblanzas de Camille Mauclair y Paul Adam.

La mayoría de los autores son poetas simbolistas franceses, ya que Darío sentía una gran atracción por la literatura francesa de finales de siglo. Solo hay dos autores hispanoamericanos, los cubanos Augusto de Armas y José Martí, el primero de los cuales escribió sin embargo su obra en francés.

Este que tengo entre manos en la foto es un ejemplar de la primera edición, una verdadera joya. A veces cuando gozo la oportunidad de manipular obras así pienso en una conferencia pronunciada por un famoso poeta español titulada "El trabajo gustoso". En ella se habla de trabajo vocativo, honesto, pagado de sí mismo como única forma de fabricar felicidad individual y por ende sociedad sana y fuerte... cada cual debe ejercer aquella labor en que pueda volcar su virtud...

Ratos como el de hoy leyendo primeras ediciones como esta hacen que mi sueldo, siendo el mismo, se triplique.

jueves, enero 06, 2011

XLI

Tú eras el huracán y yo la alta
torre que desafía su poder:
¡tenías que estrellarte o que abatirme!...
¡No pudo ser!
Tú eras el océano y yo la enhiesta
roca que firme aguarda su vaivén:
¡tenías que romperte o que arrancarme!...
¡No pudo ser!
Hermosa tú, yo altivo: acostumbrados
uno a arrollar, el otro a no ceder;
la senda estrecha, inevitable el choque...
¡No pudo ser!

martes, enero 04, 2011

Celebrando Delicia Y Ternura

Y aquel círculo sacro cerró entorno nuestro.
Todo era oscuridad y atmósfera callada.
Un centro nos unía y una emoción muy cálida.
Los cuerpos se rozaban exactos y encendidos,
y la piel profería su lenguaje perfecto.
Una dulce pasión en un círculo negro,
mientras la hoguera llena de sentidos el tiempo
y me cuenta tu mano la maravilla toda.
Si algún día he de hablar en favor de la vida,
no olvidaré esa noche en el círculo ciego,
ni a ti, que me enseñabas minuciosa lo eterno.